miércoles, febrero 27, 2013

EL DEBATE

En el día de ayer, el diputado Pinedo le preguntó al canciller Timerman si había sido imposición de Irán, que el acuerdo se hubiese anunciado en el día del aniversario del Holocausto judío.
El Canciller perdió los estribos y como un chico caprichoso exigió que retire sus palabras porque se sentía ofendido profundamente. Porfiaba que no se iba a mover de su asiento, aunque se tuviera que quedar hasta las dos de la mañana, si el diputado no retiraba sus palabras.
Digo yo...no debe estar muy convencido de las bondades de este acuerdo, si la sugerencia lo ofende. El Canciller y el gobierno de la Presidente Kirchner quieren convencernos que este acuerdo es la única posibilidad de conseguir esclarecimiento y Justicia por los atentados de AMIA y Embajada de Israel.
Si es como dice el gobierno, debería estar orgulloso de ofrecerle al pueblo judío esta ofrenda de victoria sobre sus enemigos, precisamente en el aniversario del Holocausto.
Por qué se ofende?
No convencen ni a su propio discurso que confrontado consigo mismo, se refuta.

No hay comentarios.: